Fotografía @ Diego Eidelman

En el transcurso de mayo se conmemora la gesta de la Revolución de Mayo culminando en el día 25 de mayo, un prólogo de la declaración de la independencia de nuestra nación.

 

Desde la gastronomía, se revive la tradición culinaria de aquellos tiempos con una amplia variedad de platos cargados de historia, que se reinventan de la mano de una generación inquieta de chefs con experiencias gastronómicas renovadas, nuevos métodos de cocción y ampliando las combinaciones de sabores.

Para acompañar las comidas típicas argentinas, Luigi Bosca sugiere dos vinos excepcionales, un blanco y otro tinto.

Luigi Bosca Del Alma es un White Blend de alta gama con el cuerpo y alma de la familia Arizu. Elaborado a partir de Chardonnay, Sauvignon Blanc, Pinot Gris, Riesling y Viognier, pertenecientes a viñedos propios situados en Maipú y Luján de Cuyo, muestra aromas expresivos, con notas de frutas blancas y cítricas. En boca es refrescante, amplio y voluptuoso, con texturas vibrantes y un carácter frutal definido. Maridaje patrio sugerido: empanadas (muy bien con las salteñas), quesos, humita en chala, tamales, locro y carbonada.

Luigi Bosca De Sangre, un vino representativo de los Arizu y una combinación de tradición y modernidad. Es un blend de base Cabernet Sauvignon se conjuga con la expresión floral del Syrah más las notas frutadas del Merlot. Presenta aromas sutiles con notas frutales y especiadas. Es un corte vigoroso, intenso y aterciopelado con un final persistente, producto de su extensa crianza en barricas de roble. Maridaje patrio sugerido: carnes asadas, guisos y empanadas de carne.