Por Carlos Daniel Arena
Jeep ocupa un lugar destacado en el segmento SUV y 4×4.
En esta oportunidad, probamos el nuevo Compass, del cual se dijo en su presentación a la prensa especializada que “respetando su ADN todo terreno, es un vehículo que une diseño, tecnología, desempeño y sofisticación”.
Este nuevo SUV de Jeep ya no proviene de México, sino de Brasil, y comparte la plataforma con el Renegade y la Fiat Toro. Se vende en cien países.
Como ahora proviene del MERCOSUR, tiene un precio muy competitivo para disputar el liderazgo con rivales como Kuga, Tucson o Sportage.
El Jeep Compass viene con tres equipamientos: Sport, Longitude y Limited. Esta última, la que probamos.
Diseño
Desde lejos, se ve que es un Jeep: un excelente diseño y gran calidad tanto de presencia externa como del interior. Mide 4,4 metros de largo, 1,6 de alto y más de dos metros de ancho.
Posee luces Led delanteras y traseras, barras longitudinales, portaequipajes, luz de giro led incorporado en los espejos laterales y llantas de aleación de 19” con un diseño de cinco rayos en V, calzando neumáticos de 235/45/19.
Paragolpes, pasarruedas y zonas bajas de las puertas están protegidos por plásticos de color negro, ya que es un vehículo off-road.
El interior es de un muy buen gusto, los materiales son de gran calidad y la terminación es impecable; no le encontramos un solo defecto.
Se destaca su pantalla central táctil que pone en funcionamiento el sistema Multimedia U-connect, que sería completísimo si incorporara navegador satelital. La gente de Jeep nos aclaró que no es necesario, porque al contar con Android Auto y Apple Car Play, desde esas aplicaciones conectamos el GPS del smarthphone.
La posición del conductor es alta (como en todos los Jeep), regulándose eléctricamente la butaca del mismo en seis posiciones, mientras que el volante es ajustable en altura y profundidad.
Cabe consignar detalles interesantes como el arranque del motor por botón, freno de estacionamiento eléctrico, y selector de modo de tracción cerca de la palanca de cambios, fácil de operar con la mano derecha.
Atrás van cinco pasajeros sentados, pero si el asiento del medio no se usa, se puede bajar el respaldo que se utiliza como bandeja con dos posiciones (ideal para viajes largos).
También, entre el conductor y el acompañante, hay un apoyabrazos con tapa y espacio portaobjetos y bajo la consola central hay una toma de 12 V y entrada auxiliar: muy importante para viajar.
El climatizador automático bizona enfría como en el Polo.
El habitáculo está bien insonorizado.
La rueda de auxilio es de tamaño similar a la del tren rodante: diez puntos para la gente de FCA.
Seguridad
El Jeep Compass es fabricado sobre una carrocería de gran rigidez con 70% de aceros de alta resistencia, lo que agrega una seguridad más al habitáculo en caso de colisión.
El fabricado en Europa recibió cinco estrellas en los crash test de Euro-Ncap.
Motor y desempeño
El Jeep Compass posee una planta de poder Tigershark de 2,4 litros de cubicaje, cuatro cilindros y 16 válvulas. Dos transmisiones: seis velocidades en su modelo manual y nueve en el automático. La tracción puede ser 4×2 o 4×4.
El motor es de tecnología de avanzada: 174 cv A 6.400 RPM y torque de 229 Nm a 3.900 rpm. Ágil en ciudad y veloz y firme en la ruta.
Probamos el modelo equipado con la excelente caja automática de nueve velocidades. Acelera de cero a 100 km/h en 10,02 segundos.
Pesa 1.500 kilos y gasta en promedio ocho litros de nafta Premium cada 100 kilómetros (en ruta), siendo así su autonomía de 750 kilómetros, ya que posee un tanque de combustible de 60 litros.
El sistema Select Terrain es un sistema inteligente de tracción 4X4 que permite la desconexión por completo de la tracción trasera. En el modo AUTO activa y desactiva electrónicamente el sistema 4X4 de acuerdo al camino que se transita.
En nuestra opinión, le falta una caja reductora.
La función 4WD Lock se acopla permanentemente al activarla: SNOW, SAND y MVD (nieve, arena y barro) son las modalidades que se pueden seleccionar y distribuyen el torque a las ruedas, de acuerdo a las necesidades de tracción: excelente.
Con frenos a disco en las cuatro ruedas “frena en una baldosa”, a pesar de su tonelada y media de peso.
Falta la opción Diesel: creemos que es fundamental para este excelente vehículo de la legendaria marca Jeep.
Es un placer enorme manejarlo en ruta y en off-road.